El nuevo smartphone de Zetta iba a ser el iPhone extremeño, un terminal de la calidad del iPhone 7 pero por 330 euros. Y todo ello fabricado en España.
Forocoches destapó este fin de semana la estafa. En realidad lo que hacía esta startup, Movishark Europa SLU, era utilizar teléfonos chinos (generalmente de la marca Xiaomi), les colocaba una pegatina con su logo encima (una bellota mordisqueada) y su software y los vendía al doble de su precio original.
La firma extremeña – obra del pacense Unai Nieto y del chino Eric Cui- lanzó Conquistador, su primer teléfono inteligente, en diciembre de 2014. Luego le siguieron otros modelos como Metal, dispositivos de buena calidad pero a un precio ajustado.
Según informaban desde Zetta, compraban piezas en China pero el ensamblaje se llevaba a cabo en Zafra. Sin embargo, eso del made in Spain no era cierto.
Ante este hallazgo, FACUA ha pedido a la Junta de Extremadura y la Comunidad de Madrid (donde está ubicado su domicilio social) que investiguen los dispositivos móviles de esta empresa dadas las acusaciones de fraude y la falta de información por parte de los responsables. Además, a los usuarios que poseen un terminal de la casa, la organización les ha recomendado solicitar el reembolso.