La fusión de T-Mobile y Sprint sigue en punto muerto, año y medio después de que se anunciara. Para asegurar que la operación sigue adelante T-Mobile ha lanzado un órdago en su evento Un-carrier: un ambicioso plan que sólo podría cumplirse si la combinación de ambas compañías llegara a buen puerto.
Así entre las promesas hechas ofrece 10 años de acceso 5G gratuito para los socorristas en todas las agencias públicas y sin fines de lucro, como la policía, bomberos y servicios médicos de emergencia (EMS). Igualmente, admitió que el Nuevo T-Mobile cerrará la “brecha” de conexión, destinando 10.000 millones de dólares para dar acceso gratuito online y hardware a unos 10 millones de hogares con niños que no tienen servicio.
En cuanto a los precios, su propuesta es un plan de servicio prepago a 15 dólares por mes por 2 GB de datos; 4G o 5G y 5 GB de datos 25 dólares mensuales.
“La ejecución de todas estas promesas tendrá un gran impacto en AT&T y Verizon, tanto en términos competitivos como en términos de buena voluntad corporativa. Estos carriers no pueden sentarse sin una respuesta “, ha comentado Lynnette Luna, analista principal de GlobalData.
Sin embargo, para que estas promesas puedan cumplirse, la operadora necesita acumular una gran cantidad de espectro inalámbrico. T-Mobile tiene una gran franja de espectro de 600 MHz y tendrá acceso al de 2.5 GHz de Sprint, siempre que se cierre la unión.
Los reguladores estadounidenses se oponen a esta fusión por razones antimonopolio y sus consecuencias en la competencia y los precios.
