La operación, que se ha fraguado en tierras niponas, se ha cerrado valorando al operador de telefonía móvil español Airtel en 1,65 billones de pesetas (9.917 millones de euros), por lo que Vodafone ha pagado por el 17,8 de las acciones de BT un total de 295.000 millones de pesetas (1.772 millones de euros).
A su vez, el total de la operación culmina con la adquisición de las acciones de BT en el operador de telefonía fija Japan Telecom, que también posee varias inversiones en operadores móviles. De este modo, Vodafone pagará 995.300 millones de pesetas (5.900 millones de euros) por el 20 por ciento de las acciones de BT en la nipona. Con esta operación, Vodafone trata de ir consolidando su posición en Japón y lograr una mejor posición en ese mercado, que le permita competir con NTT DoCoMo.
La operación global se ha valorado en 1,3 billones de pesetas (7.800 millones de euros) que Vodafone será capaz de financiar gracias a su posición de tesorero tras la venta de activos valorada en 9,25 billones de pesetas (55.600 millones de eros). A esto hay que añadir, que la compañía ha puesto en marcha un plan de ampliación de capital de unos 995.300 millones de pesetas (cerca de 6.000 millones de euros).
