La Generalitat convino hace un año la convocatoria de este concurso para unos servicios que actualmente presta Al-pi, filial de France Telecom. La importancia del acuerdo es por tanto clave para esta operadora porque una buena parte de su facturación depende de su contrato con el Govern.
El grueso de los servicios de voz y datos corporativos se contratará a través de un procedimiento negociado con publicidad que se presenta en tres lotes, a partir de características técnicas diferenciadas.
El primer lote corresponde a los servicios de transporte y datos para centros ubicados en poblaciones de más de 40.000 habitantes y los del área metropolitana de Barcelona. El segundo incluye las instalaciones situadas en poblaciones de menos de 40.000 habitantes y en las de fuera del área metropolitana. Y el tercero corresponde a los servicios de voz y videoconferencia corporativos y a los de la red inteligente.
El resto de los servicios se adjudicarán a través de un procedimiento abierto que se presenta dividido en dos lotes: servicios de Internet no centrales, con un importe máximo de 900.000 euros, y servicios de numeración abreviada especial de voz, con un montante de 550.000 euros. La duración de los servicios de esta segunda licitación será de dos años prorrogables a otros dos.
El nuevo concurso pasa por definir la estrategia tecnológica de voz y datos de la Generalitat, crear una oferta homogénea de servicios de telecomunicaciones, construir el modelo de provisión y facturación de servicios, establecer el modelo de gestión de la red corporativa, asegurar la calidad del servicio y definir el plan de evolución de la red en el horizonte 2006-2009.
Después del acuerdo de los servicios de voz y datos, queda pendiente la adjudicación del contrato de telefonía móvil, prevista para marzo del 2007. La Generalitat ya ha anunciado que no renovará el contrato con Amena, filial de France Télécom, al igual que Al-pi.




