Después de estudiar, a lo largo del pasado año, la posibilidad de salir a Bolsa, finalmente Peribit ha realizado los trámites pertinentes y ya está a las puertas de ver cumplida su entrada en el mercado de valores, hecho que se producirá «en torno al verano», según explica Jordi Garasa, director regional de la firma para el Sur de Europa, «tan pronto como aprueben el último papeleo».
El anuncio de su salto al parqué coincide en el tiempo con la confirmación de su cierre de año fiscal el pasado 31 de marzo, un ejercicio saludable para Peribit puesto que «aunque se nos impide dar cifras concretas, puedo asegurar que hemos crecido un cien por cien con respecto a 2003», indica el directivo. A pesar de que los números no pueden darse a conocer, si podemos hacernos una idea mediante un cálculo aproximado teniendo en cuenta que en 2003 la compañía facturó 13 millones de dólares (algo más de 10 millones de euros) a nivel mundial.
En nuestro país, los resultados también han sido satisfactorios al «pasar de una decena de clientes hace dos años a los más de 30 conseguidos en 2004, donde destaca con especial relevancia ProSegur con más de 70 equipos de Peribit repartidos entre España e Italia, mientras que en Portugal hemos cerrado un acuerdo con AXA».
Los buenos datos anteriores vienen soportados por la respuesta de los clientes a las soluciones de aceleramiento del rendimiento de las aplicaciones y posibilidad para incrementar la capacidad WAN de las empresas. Ahora, Peribit completa esta oferta con la mejora de sus propuestas orientándose a la aceleración de flujos de aplicaciones, ¿cómo? Con AppFlow, que «añade nuevas funcionalidades a nuestras soluciones acelerando el rendimiento de tres aplicaciones: Microsoft Exchange, Servicios de archivos Microsoft (CIFS) y aquellas basadas en el protocolo http sobre redes de área extensa.
Además, en la familia de productos Sequence Mirror (SM), Peribit añade el modelo SM-250, pensado para las delegaciones, que soporta líneas de 128 Kbps a 2 Mbps.
Con estas novedades, el mapa de soluciones de Peribit se amplia quedando modificado de tal modo que encontramos un apartado de soluciones sin disco donde aparece SR-50 en el core de la empresa, SR15-20 para las delegaciones y SR-100 en el centro de la compañía; frente a un segundo ámbito donde quedaría SM-500 en el centro de la firma y SM-250 en las delegaciones, pero ambos con discos. ¿Por qué se decanta entonces el cliente? ¿tecnología Peribit con o sin disco? Garasa despeja dudas: «dependerá de las necesidades del negocio, con disco el precio del producto se encarece pero la empresa dispone de funcionalidades añadidas como las que aporta AppFlow, la compañía debe fijar sus prioridades, tenemos el caso de un cliente como Recreativos Franco, donde cuentan con un ancho de banda de 2 Mbps para comunicarse entre Madrid y Arganda, en teoría bastaría con tecnología sin discos, pero al transmitir grandes ficheros encontraban cuellos de botella e incrementar el ancho de banda hasta diez veces eleva el coste a cifras prohibitivas, de ahí que la solución era AppFlow para CIFS, es decir, acudir a la tecnología de Peribit con discos».
