El estudio, basado en datos de ofertas de empleo en los países del G7, muestra además que siete de los diez puestos de mayor crecimiento están ligados directamente a la IA.
El análisis de 50 roles TIC revela que las habilidades en IA se han vuelto imprescindibles. La demanda se concentra en ingenieros de IA y aprendizaje automático, especialistas en gobernanza y riesgo, y expertos en procesamiento de lenguaje natural. Al mismo tiempo, se detecta un déficit crítico en áreas como IA generativa, modelos de lenguaje grande (LLM), ingeniería rápida y seguridad en IA.
El informe también destaca un aumento en la demanda de competencias éticas y de gobernanza, con un crecimiento del 150% en habilidades de regulación y del 125% en ética de la IA. Además, se subraya que capacidades humanas como la comunicación, la colaboración y el liderazgo resultan clave para garantizar un uso responsable de la tecnología.
Centros tecnológicos en expansión
El crecimiento del empleo relacionado con la IA es especialmente notable en Silicon Valley, con un incremento del 156% en contrataciones, seguido de Londres y Toronto. También aparecen nuevos polos en Manchester, Lyon y Vancouver, con subidas superiores al 70% en la oferta laboral en este campo.
El Consorcio, que reúne a compañías tecnológicas internacionales, anunció el objetivo de formar y recapacitar a 95 millones de personas en todo el mundo durante la próxima década. Para ello, se han puesto a disposición de empresas y trabajadores varios recursos: un manual de estrategias de capacitación, un glosario actualizado de habilidades en IA y una base de datos con más de 200 cursos especializados.
Según el estudio, las habilidades en inteligencia artificial han pasado de ser opcionales a convertirse en esenciales. El reto ahora es asegurar que la fuerza laboral cuente con las herramientas necesarias no solo para adaptarse a la transformación tecnológica, sino también para garantizar que se aplique de forma segura y responsable.
