Cualquier edificio moderno que se precie tiene un sistema de cableado estructurado como componente esencial. Como infraestructura física de cables y dispositivos que interconecta todos los equipos de comunicación en un inmueble, su instalación debe realizarse atendiendo a una serie de parámetros y recomendaciones para asegurar que se cumplen con las necesidades presentes y futuras de la edificación.
En este artículo te contamos cómo realizar una instalación exitosa, los pasos a seguir para lograrlo y consejos para que este proceso llegue a buen puerto.
Índice de temas
Qué es el cableado estructurado
El cableado estructurado es una infraestructura organizada y estandarizada de cables y componentes que se utiliza para establecer una red de comunicaciones eficiente y versátil en edificios, oficinas y otros espacios. Se construye para conectar distintos dispositivos -trasportar señales desde dispositivos emisores a otros receptores- en redes locales. En otras palabras, es el conjunto de cables, conectores, canalizaciones y equipos que componen la infraestructura de telecomunicaciones interior de un edificio o recinto y sirve como base fundamental para transmitir datos, voz, video y otros servicios de comunicación de manera confiable y efectiva.
Ofrece un enfoque organizado para el diseño de la red, reemplazando el caos del cableado punto a punto con un sistema estandarizado y metódico. Una infraestructura simplificada que contribuye a reducir el error humano, mejorar la confiabilidad y proporcionar flexibilidad y escalabilidad para adaptarse a las nuevas tecnologías y demanda a medida que surgen.
Abarca todo, desde las instalaciones de entrada donde el cableado ingresa a un edificio hasta el cableado troncal que conecta diferentes pisos o áreas hasta el cableado horizontal que conecta las estaciones de trabajo con la red.
Componentes del cableado estructurado
Según los estándares de la Asociación de la Industria de las Telecomunicaciones (TIA), el sistema de cableado estructurado se divide en seis componentes:
- Instalaciones de entrada: Dónde se conectan los cables del proveedor de servicios externos a las instalaciones del cliente.
- Salas de equipos: Alojamiento de importantes equipos de telecomunicaciones.
- Salas de telecomunicaciones: Conexión de cableado troncal y horizontal.
- Cableado troncal: (cableado vertical o backbone): Conexión de diferentes plantas o edificios.
- Cableado horizontal: Se extiende desde las salas de telecomunicaciones hasta las áreas de trabajo.
- Componentes del área de trabajo: Conexión de dispositivos de usuario final a tomas de corriente.
Tipos de cables en el cableado estructurado
Los principales tipos de cables en cableado estructurado son los pares trenzados (UTP o Unshielded Twisted Pair, STP o Shielded Twisted Pair, FTP o Foiled Twisted Pair) y la fibra óptica. Por lo general, los cables de par trenzado se utilizan para conexiones locales, mientras que la fibra óptica es para largas distancias y altas velocidades, conectando diferentes edificios o pisos (backbone). Aunque estas dos modalidades son las más empleadas, también tenemos que tener en cuenta el cable coaxial y los cables de conexión o latiguillos.

Cableado de par trenzado
El cableado de par trenzado suele emplearse en las instalaciones de cableado estructurado debido a su capacidad para reducir la interferencia electromagnética. En la elección entre UTP, STP y FTP se tienen en cuenta aspectos como la interferencia ambiental (uno es más adecuado que otro para áreas con alto ruido electromagnético), y el presupuesto.
Además, existen diferentes categorías (como Cat 6, Cat 6a, etc.) que definen el rendimiento y la velocidad del cable de par trenzado.
Fibra óptica
El cableado de fibra óptica utiliza la luz para transmitir datos, lo que facilita velocidades ultra altas y comunicación de larga distancia sin degradación de la señal. Puede ser monomodo para comunicaciones de largo alcance y multimodo para distancias más cortas. A pesar de que supone costes más altos y requisitos de instalación complejos, es óptima para maximizar el rendimiento y preparar la red para el futuro. La inmunidad de la fibra óptica a las interferencias electromagnéticas la convierte en una excelente opción para centros de datos y otras infraestructuras críticas. Además, su escalabilidad la permite responder a las crecientes demandas de datos de las empresas.
Cable coaxial
Los cables coaxiales son reconocidos por su núcleo de cobre grueso y aislado, lo que los hace ideales para servicios de televisión e Internet a largas distancias con una pérdida de señal mínima. Estos cables son duraderos y ofrecen un excelente blindaje contra interferencias, pero son más voluminosos y difíciles de instalar que los cables de par trenzado. El coaxial es una opción sólida para entornos que exigen una transmisión estable a larga distancia y robustez física. La fiabilidad de los cables coaxiales los hace adecuados para instalaciones externas donde la exposición a factores ambientales es una preocupación. Además, sus capacidades de alto ancho de banda garantizan una prestación de servicios confiable en escenarios de alta demanda.
Cables de conexión
Los cables de conexión o latiguillos son cables cortos y flexibles cruciales para unir dos puntos cercanos como conectar computadoras a conmutadores. Disponibles en varios tipos y longitudes, ayudan a mantener la red organizada y eficiente. Se antojan esenciales para solucionar problemas y probar nuevos enlaces sin interrumpir la configuración de red existente. También ofrecen la flexibilidad de cambiar rápidamente los diseños de red, adaptándose a los cambios en los arreglos de la oficina o las actualizaciones tecnológicas.
¿Qué cable elegir?
La elección correcta del cableado dependerá de las características de la red, el entorno de instalación y el presupuesto. El par trenzado suele ser adecuado para la mayoría de las necesidades, el coaxial es excelente para aplicaciones de largo alcance, la fibra óptica es la mejor para un alto rendimiento y preparación para el futuro, y los cables de conexión aportan conectividad y organización.
La normativa en el cableado estructurado
La TIA y la Alianza de Industrias Electrónicas (EIA) han desarrollado normas integrales que rigen las instalaciones de cableado estructurado entre las que se incluyen:
- TIA/EIA-568: Norma de cableado de telecomunicaciones para edificios comerciales.
- TIA/EIA-569: Norma de construcción comercial para vías y espacios de telecomunicaciones.
- TIA/EIA-570: Estándar de cableado de telecomunicaciones residencial y comercial ligero.
- TIA/EIA-606: Norma de Administración para Infraestructura de Telecomunicaciones.
- TIA/EIA-607: Requisitos de conexión a tierra y unión de edificios comerciales.
A estas normativas hay que añadir otras como:
ISO/IEC 11801: Estándar internacional que define los requisitos para el diseño, instalación y pruebas de los sistemas de cableado en redes de telecomunicaciones. Su objetivo es asegurar que las redes de comunicación sean robustas, eficientes y capaces de soportar tecnologías emergentes.
ANSI/TIA-942: Establece los requisitos para la infraestructura de cableado y telecomunicaciones en los centros de datos, definiendo subsistemas, áreas funcionales y componentes como el cableado horizontal y de backbone.
Cómo instalar cableado estructurado: el paso a paso
La instalación de cableado estructurado es un método integral para diseñar, instalar y gestionar esa red de manera organizada, estandarizada y flexible, incluyendo cables, conectores, canalizaciones y equipos. Se trata de un proceso que requiere planificación y precisión y que se basa en estándares de la industria para un diseño y una instalación uniformes. Y es que, no se trata simplemente de colocar cables de un punto a otro, requiere de una meticulosa planificación y ejecución.

Estos serían los pasos a seguir:
Paso 1: Diseño del sistema
El primer paso a la hora de instalar un sistema de cableado estructurado es realizar un buen diseño del mismo atendiendo a cuestiones como la disposición física del edificio, así como a las necesidades presentes y futuras del negocio. O sea, hay que configurarlo para que permita actualizaciones y expansiones posteriores.
En la planificación hay que tener en cuenta la proyección de crecimiento de la red lo que implica el número de dispositivos conectados, la necesidad de mayor velocidad, la capacidad de almacenamiento o nuevas tecnologías que puedan surgir
Es la fase previa de planificación en la que hay que identificar requerimientos como las necesidades de la red, incluyendo la cantidad de dispositivos que se conectarán lo que determinará la cantidad de cable necesario y la capacidad y rendimiento que se espera de la red. Sobre este particular, se aconseja tener en cuenta el margen adicional para futuras expansiones.
Este plan ha de contemplar igualmente el ancho de banda necesario y la definición de la topología -cómo se organizará todo-, así como la creación de diagramas de la red que muestren cómo se conectarán los dispositivos y cómo se repartirá el cableado en el edificio.
Otra cuestión importante es precisamente la distribución física de los equipos y las tomas. Una buena ubicación y colocación es aval de una mejor calidad de las conexiones al minimizar las distancias y evitar las pérdidas de señal o interferencias. Además de facilitar el acceso para el mantenimiento y posibles actualizaciones.
Paso 2: Selección de los materiales y preparación de herramientas
Tras realizar el diseño hay que seleccionar el tipo de cable y otros componentes necesarios para el proyecto como conectores, paneles de conexión, tomas de corriente, canaletas y otros. Es importante esta elección porque determinará el rendimiento final de la red por lo que hay que comprobar que cables y hardware admitan las velocidades de transmisión requeridas y que se garantiza la compatibilidad entre los diferentes componentes.
El corazón de cualquier instalación son los cables. Dependiendo de las necesidades se puede optar por cables UTP, STP, fibra óptica… La elección debe basarse en factores como la distancia, el tipo de datos a transmitir y el ambiente en el que se instalarán. Por ejemplo, para grandes distancias sin interferencia, la fibra óptica es la mejor opción.
Por otro lado, están las canaletas que, además de ser un componente estético, es un elemento de protección puesto que evitan que los cables estén expuestos a factores externos que puedan dañarlos, facilitando su organización y mantenimiento. En este sentido, es importante elegir canaletas de buena calidad, que resistan factores ambientales si están al aire libre y que tengan un tamaño adecuado para la cantidad de cables que alojarán.
Y otras soluciones que forman parte de muchas de estas instalaciones son los racks que hacen posible organizan los dispositivos, como switches, routers y servidores. Además, proporcionan ventilación para evitar el sobrecalentamiento. Cuando se elige un armario hay que tener en cuenta el espacio, el número de equipos a instalar y la facilidad para realizar conexiones o mantenimientos.

Junto a los materiales, hay que adquirir las herramientas que nos permitirán hacer la instalación como pelacables, cortadoras de cables, destornilladores, crimpadoras, etcétera. Así como bridas y etiquetas que contribuyen a mantener el sistema ordenado y facilitarán futuras intervenciones.
Paso 3: Montaje: instalación del cableado estructurado
Diseño hecho y materiales listos, el siguiente paso es la instalación de los cables. Esto implica hacer agujeros, pasar cables a través de paredes y techos, y conectarlos a los paneles de parcheo.
En esta etapa seleccionar el sitio adecuado, proteger los equipos y garantizar un sistema eficiente resulta vital. Por ejemplo, si se instala un rack de comunicaciones hay que tener en cuenta que debe estar en un lugar accesible para los técnicos, permitiendo intervenciones y mantenimientos con facilidad. Y con espacio adicional para futuras expansiones. Debe contar con suficiente ventilación para evitar sobrecalentamientos y estar alejado de fuentes de interferencia electromagnética.
Otro aspecto importante es asegurarse de que el lugar de la instalación del sistema de cableado estructurado es fresco y está libre de humedad para cerciorarse de que equipos y cables conservan su integridad.
En este proceso hablamos de instalar canaletas o tubos en las parades y techos para contener los cables de manera ordenada y protegerlos. De instalar cableado horizontal desde las tomas de corriente en las áreas de trabajo hasta los paneles de conexión en los cuartos de telecomunicaciones; y del cableado troncal que conectará los diferentes cuartos de telecomunicaciones.

Uno de los primeros pasos del montaje es la instalación de entrada y supone decidir por dónde ingresarán los cables y cómo se distribuirán en el espacio. Es esencial garantizar que las entradas estén protegidas contra el polvo, agua o cualquier otro elemento que pueda dañar los cables. Además, planificar una ruta lógica y eficiente para los cables puede reducir la necesidad de intervenciones futuras.
Una vez que los cables han ingresado al espacio designado, la distribución interna se encarga de llevar cada cable a su destino correspondiente. La clave aquí es la organización. Como consejos: utilizar etiquetas para identificar cables, agruparlos según su función y evitar cruzamientos innecesarios. El objetivo es que, a simple vista, cualquier técnico pueda identificar y acceder a cualquier cable sin inconvenientes.
La importancia del cuarto de telecomunicaciones
Se entiende por un cuarto de telecomunicaciones un espacio centralizado y exclusivo en un edificio donde se aloja, organiza y conecta el equipamiento y el cableado de redes como voz, datos, televisión e internet. Alberga elementos pasivos como racks y paneles de parcheo, y equipos activos como switches, routers y firewalls, siendo el punto neurálgico para la distribución de la información a lo largo de todo el edificio.
Paso 4: Conexión de los componentes
Una vez instalados los cables con las mini obras pertinentes llega la hora de conectar todos los componentes del sistema. A saber, switches, routers y otros dispositivos de conexión.
En este proceso se deben instalar los paneles de conexión en los cuartos de telecomunicaciones y posteriormente conectar los cables de cableado horizontal a los paneles.

Dos aspectos importantes en esta fase es el asegurarse de seguir las normas de cableado estructurado para asegurar la funcionalidad de la red y etiquetar cada cable de manera única en ambos extremos para identificar fácilmente su ubicación y función.
Paso 5: Pruebas y verificación
La siguiente etapa consiste en probar y certificar la instalación. Esto implica verificar que cada cable funciona correctamente y que el sistema en su conjunto cumple con las normas y especificaciones técnicas.
Se llevan a cabo pruebas para garantizar la continuidad de cada cable y asegurarse de que estén conectados correctamente; además de test de velocidad y rendimiento de la red para comprobar que cumple con los requisitos previstos.
Paso 6: Documentación
Otro de los puntos a tener en cuenta en este procedimiento es documentar todos los aspectos del cableado, incluyendo diagramas, ubicación de cables, identificación de los mismos y otros detalles.
Paso 7: Mantenimiento y gestión
El proceso de instalación de cableado estructurado no acaba una vez que está todo acoplado y funcionando. Requiere de un mantenimiento regular y unas actualizaciones periódicas. Desde el empleo de organizadores para conservar los cables ordenados y evitar enredos, hasta la obligatoriedad de realizar mantenimientos regulares para cerciorarse de que el cableado está en buen estado y operando correctamente, comprobando que no hay desgaste, daños o fallos de los componentes.
Un sistema bien mantenido y actualizado no sólo garantiza una operatividad constante, sino que también prolonga su vida útil, representando ahorros significativos a largo plazo
Pero no se trata sólo de este mantenimiento preventivo regular, también hay que llevar a cabo actualizaciones constantes para responder a las nuevas necesidades. No en vano, puede que una red instalada inicialmente no sea capaz de soportar ciertas cargas y velocidades que imponen nuevos requerimientos. De ahí tenerlo bien actualizado.
Consejos para instalar el cableado de red
Tener en cuenta el diseño o plano de planta
Imprescindible a la hora de instalar un sistema de cableado estructurado es tener un diseño o plano de planta de la instalación. Se ha de comprender la distribución espacial de las estaciones de trabajo, salas de equipos y salas de telecomunicaciones para establecer las rutas óptimas de cableado horizontal y vertical.
También es importante identificar ubicaciones ideales para puntos de consolidación y puntos de transición, que faciliten cambios o expansiones en la red sin interrupciones significativas.
Tamaño y estructura
Otro aspecto importante es el tamaño y la estructura del edificio o campus donde se va a instalar nuestro cableado estructurado. Ni que decir tiene que las instalaciones más grandes con múltiples edificios o pisos requieren un diseño más complejo para garantizar que todas las áreas cuenten con el servicio adecuado.
Protección de los cables
Igualmente hay que tener en cuenta que los cables, como núcleo o core de toda la instalación, hay de estar bien preservados. Eso supone asegurar su protección contra la intemperie. Si está expuesto al exterior, nos debemos cerciorar de que esté protegido adecuadamente contra la humedad y la radiación solar mediante tuberías y cubiertas protectoras. También hay que implementar medidas para prevenir la entrada de roedores o insectos que podrían dañarlos, como el uso de selladores y mallas protectoras.
Por otra parte, la proximidad de los cables de datos a fuentes de interferencia electromagnética, como cables de alimentación o luces fluorescentes, puede afectar la calidad de la señal y la seguridad de la red. Se deben mantener los cables de datos alejados de fuentes de interferencia y utilizar métodos de enrutamiento adecuados para evitar cruces y enredos.
¡Cuidado con la tensión!
Por un lado, hay que evitar la sobrecarga así que no conectes más dispositivos de los que la capacidad del cableado pueda soportar. Esto puede causar sobrecalentamiento y daños.
Por otro está la gestión de tensión. Hay que impedir la tensión excesiva en los cables al doblarlos o estirarlos demasiado. De gran ayuda son las guías de cables y soportes adecuados para mantenerlos en su lugar.
Orden y normativa
Lo hemos comentado anteriormente, pero no está de más repetirlo. El orden y el etiquetado de los cables es vital porque simplificará futuras tareas de mantenimiento y solución de problemas.
Junto a ello mantener registros detallados de la instalación original y cualquier modificación posterior. Además del cumplimiento normativo. Nos tenemos que asegurar de que el cableado cumple con todas las normativas y regulaciones locales y nacionales. Algo especialmente importante en entornos comerciales e industriales.
Inspecciones regulares y mantenimiento preventivo
Ya hemos dicho que una instalación de cableado estructurado no acaba con la instalación en sí, requiere una inspección regular y periódica para identificar desgaste, daños, corrosión o cualquier otro problema. Un mantenimiento preventivo que permita descubrir y abordar problemas potenciales antes de que se conviertan en fallos importantes.

Plan de contingencia y copias de seguridad
Enlazado con el punto anterior podemos hablar de lo conveniente de desarrollar un plan de contingencia que incluya procedimientos para la restauración rápida del cableado en caso de desastres naturales u otros eventos catastróficos. Además, si el cableado está relacionado con sistemas de datos críticos, realizar copias de seguridad regulares ayudará a evitar la pérdida de información en caso de problemas.
Precisamente la seguridad lógica es un punto reseñable lo que implica utilizar contraseñas fuertes y cambiarlas periódicamente en los dispositivos de red como switches y routers o recurrir al cifrado para la transmisión de datos. También implementar soluciones de monitoreo y detección de intrusiones en la red para identificar actividades sospechosas o intentos de acceso no autorizados. Y, por supuesto, capacitación y concienciación educando a los usuarios sobre las mejores prácticas.
Seguridad y capacitación del personal
El personal que trabaja con el cableado ha de estar capacitado en prácticas seguras de instalación y mantenimiento. Al realizar su labor debe tener en cuenta el utilizar un equipo de protección personal (EPP) apropiado y desconectar la energía antes de realizar los trabajos.
Elegir el instalador de cableado estructurado adecuado
Seleccionar el servicio de instalación profesional adecuado es esencial para el éxito de su proyecto de cableado estructurado. En este apartado se debe tener en cuenta la experiencia y el conocimiento de este instalador, un saber hacer profundo tanto de los aspectos técnicos como de los retos prácticas de una instalación de este calado. Al igual que debemos asegurarnos de que tenga las certificaciones pertinentes y que ofrezca una gama completa de servicios que abarque desde la evaluación y el diseño inicial, pasando por la instalación y el posterior mantenimiento.
Precauciones de seguridad en la instalación de cableado estructurado
En los consejos para instalar un sistema de cableado estructurado hemos aludido a algunas cuestiones de seguridad como el evitar la sobrecarga de la instalación, es decir, no conectar más dispositivos de los que la capacidad del cableado pueda soportar, así como no colocar cables excesivamente tensionados o estirados.
Sin embargo, lo primero de todo es que el operario que vaya a realizar la instalación esté capacitado para prácticas seguras de instalación y mantenimiento y disponga del pertinente EPP, o sea, la ropa y calzado idóneo para estos trabajos, junto con el equipamiento necesario como cascos, gafas, tapones para los oídos, guantes y mascarillas. Igualmente debe tener conocimiento de las herramientas mecánicas y manuales que va a emplear porque eso reducirá la probabilidad de accidentes.
En estas instalaciones hay que tomar precauciones con el manejo de electricidad como apagar la alimentación cuando sea posible y evitar cables sueltos. Además de impedir el contacto con agua.
Por supuesto, hay que mantener el área de trabajo limpia y ordenada y señalizarla cuando haya gente transitando por el lugar. Y hay que conocer e inspeccionar el lugar de trabajo: clima, humedad, higiene, alturas, presencia de químicos o material inflamable, ruido, humos… y dónde se encuentran, por ejemplo, los extintores de incendios o el botiquín, entre otros elementos de seguridad.









