La Universidad de Alicante (UA) avanza en el desarrollo de sistemas que permitan comunicaciones cuánticas más seguras y eficientes. Su grupo de investigación GAdUA (Grup d’Àlgebra de la Universitat d’Alacant) impulsa el proyecto NCCC (Nuevas Construcciones de Códigos Cuánticos de Subespacio y Convolucionales), centrado en minimizar el “ruido” que afecta a la transmisión de información entre ordenadores cuánticos.
El proyecto se enmarca en el Plan de Comunicación Cuántica de la Comunitat Valenciana, en el que colaboran cuatro universidades: la UA, la Universitat Politècnica de València, la Universitat de València y la Universidad CEU Cardenal Herrera. Su objetivo común es mejorar la calidad y la fiabilidad de las comunicaciones en entornos donde las técnicas tradicionales de corrección de errores ya no resultan válidas.
Durante la transmisión cuántica, la información puede distorsionarse debido a interferencias. Las técnicas clásicas no sirven porque no se puede replicar la información cuántica sin alterar su estado. Por ello, el equipo de la UA trabaja en una nueva aproximación teórica y práctica para proteger los datos sin necesidad de duplicarlos.
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Códigos cuánticos para proteger la información
El grupo GAdUA estudia la adaptación de los códigos de subespacio y los códigos convolucionales al contexto cuántico. Estos modelos ya han mostrado eficacia en comunicaciones clásicas, pero su complejidad matemática había limitado su uso en entornos cuánticos. La investigación busca superar esa barrera y trasladar su potencial a un escenario donde la tasa de errores es mucho más alta.
“Hablamos de proteger la información cuántica”, explicó Diego Napp, investigador principal del proyecto. Según Napp, “si diseñamos de forma inteligente la protección de los datos antes de enviarlos, podremos corregir muchísimos errores que se producen en estos canales”. El reto es lograr comunicaciones cuánticas estables y seguras, algo esencial para empresas, administraciones y centros de investigación que ya trabajan con esta tecnología.
La investigadora Xaro Soler, también responsable del proyecto, subrayó que la meta es que la fiabilidad deje de ser una aspiración y se convierta en un estándar operativo. De esta manera, las soluciones podrían integrarse sin necesidad de conocimientos técnicos avanzados, garantizando comunicaciones seguras y eficientes para todo tipo de usuarios.
Impacto y proyección del plan valenciano
El proyecto forma parte del Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas, incluido en el Plan de Resiliencia de la Unión Europea, con una inversión total de 76 millones de euros. En la Comunitat Valenciana, el programa se financia con 1,8 millones de euros, de los cuales el 65% procede del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y el 35% de la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo.
El plan busca impulsar la investigación y el desarrollo en comunicaciones cuánticas, una de las áreas tecnológicas más estratégicas para el futuro de las telecomunicaciones y la ciberseguridad. La Comunitat Valenciana participa junto con Castilla y León, Cataluña, País Vasco, Galicia y Madrid, además del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Con esta iniciativa, la UA consolida su papel como referente en innovación científica y en la transferencia de conocimiento con impacto social y económico. La investigación del grupo GAdUA representa un paso importante para que la tecnología cuántica avance hacia aplicaciones prácticas, donde la fiabilidad y la seguridad sean parte integral del funcionamiento diario de los sistemas.
