Arthur D. Little ha publicado recientemente el informe A Simplification Agenda for European Telecoms, en el que examina cómo la industria de las telecomunicaciones puede superar la complejidad estructural y los desafíos regulatorios para desbloquear la competitividad, la inversión y el crecimiento. El documento -elaborado para Connect Europe-, destaca medidas prácticas para simplificar el panorama de las telco en el viejo continente, desde la racionalización de la red y las estructuras de mercado hasta la reforma regulatoria y los nuevos modelos de asociación. Además, pone de manifiesto la complejidad legislativa existente en Europa, una maraña de obligaciones reglamentarias que están frenando el crecimiento.
Para profundizar en los resultados de este análisis, Redes&Telecom, ha entrevistado a Elisabetta Cafforio, partner de la consultora.
Según el informe, ¿por qué es urgente la simplificación para la salud del sector europeo de las telecomunicaciones?
Porque la sobrerregulación actual no beneficia a los consumidores finales y desalienta las inversiones en telecomunicaciones necesarias para los objetivos de digitalización.
¿Cuál es su opinión sobre los informes Letta y Draghi?
Ambos informes enfatizan la importancia de la coordinación estratégica, la simplificación y la inversión en infraestructura crítica. Se centran en la consolidación como clave del éxito, la promoción del mercado único, la homogeneización de las normas en toda la UE y la desregulación.
En una Europa con tantos países, ¿es posible armonizar los intereses de los diferentes gobiernos para mejorar la competitividad en el sector de las telecomunicaciones?
Tenemos que hacerlo si queremos crear una Europa competitiva, tal y como afirma la «Brújula Europea de Competitividad» (enero de 2025), una hoja de ruta para restaurar el dinamismo y el crecimiento económico de Europa, que introduce cinco facilitadores horizontales para aumentar la competitividad europea: 1) las propuestas ómnibus, para simplificar las obligaciones de información de la UE en materia de sostenibilidad; 2) la estrategia horizontal para el mercado interior para modernizar las normas de ese mercado único; 3) la unión de ahorro e inversión para crear nuevos productos de ahorro e inversión, proporcionando incentivos para el capital de riesgo; 4) la unión de competencias para garantizar una educación, formación y aprendizaje permanente de alta calidad para cubrir las brechas en cuanto a habilidades y mano de obra; y 5) la herramienta de coordinación de la competitividad para garantizar la aplicación a nivel nacional y de la UE de los objetivos políticos estratégicos comunes de la UE.
¿Cómo puede la industria de las telecomunicaciones superar la complejidad estructural y los desafíos regulatorios? ¿Alguna clave?
Como se describe en nuestro reciente mediante tres vías:
- Simplificando y alineando las regulaciones para reflejar las necesidades actuales de los consumidores
2. Garantizando la igualdad de condiciones entre servicios equivalentes
3. Armonizando la aplicación de la ley y reduciendo la fragmentación en toda la UE
¿Cuál es el papel de la política y la regulación a la hora de favorecer la inversión y la innovación? ¿Hay un freno importante? ¿Cuál? ¿Quizás en cuestiones de espectro?
La regulación es un instrumento clave para crear un entorno favorable para las inversiones a medio y largo plazo, junto con la desgravación fiscal, la financiación pública y la renovación de licencias de espectro.
¿Cómo pueden las operadoras reestructurarse para seguir siendo competitivas en un mercado que cambia rápidamente?
Mediante la reconfiguración de activos, la diversificación y la rentabilidad (también a través de la adopción de IA.)
En su opinión, ¿cuántos operadores debería tener Europa para ser competitiva frente a Estados Unidos o China?
A día de hoy, Europa no tiene todavía actores fuertes de telecomunicaciones. Por supuesto que 34 grupos de telecomunicaciones no pueden competir a mayor escala frente a los actores globales de EE. UU. y China.
¿Habrá concentraciones de operadoras pronto?
El sector está pidiendo un patrón de consolidación más fácil, con la esperanza de que la próxima Ley de Redes Digitales lo facilite.
Otro punto importante es el uso compartido de redes e infraestructura, ¿cómo ayudará la Ley GIA?
A través de la regulación de acceso abierto. GIA incluye fomentar el uso compartido de conductos para cables de banda ancha, permitir que los constructores de redes colaboren con proyectos de obras públicas e instalar cables de fibra simultáneamente, agilizar los procedimientos administrativos y garantizar el acceso a banda ancha de alta velocidad en los edificios.
Tras perder la carrera de la nube, ¿Europa también ha perdido la carrera en redes 5G, 6G e IA, o aún está a tiempo de liderar estos cambios tecnológicos?
No seamos tan catastrofistas 😉 Sin duda, Europa necesita cambiar de actitud, tener una visión industrial a más largo plazo y apoyar a los actores en su inversión en nuevas tecnologías.








