La red es el ordenador. Esta frase resume perfectamente el pensamiento de Scott McNealy, presidente de Sun Microsystems. Se trata de una afirmación que avala la apuesta de su compañía hacia el acceso abierto de la información, a través de la Red. Esta obsesión de McNealy por proveer la conexión a cualquier persona, en cualquier lugar, en cualquier momento y bajo cualquier dispositivo le llevó a uno de sus grandes aciertos, cuando en 1995 la firma optó por introducir la tecnología de la plataforma independiente Java TM.
McNealy ocupa el cargo de Jefe Ejecutivo de Sun Microsystems (CEO) desde 1984. Cofundador de la firma ha conseguido, en menos de veinte años, convertir a su compañía en uno de los proveedores más destacados de soluciones informáticas de redes, con unos ingresos de 15.700 millones de dólares en el último año fiscal. Tiene 36.000 empleados repartidos por todo el mundo, de los que España acumula una pequeña cantidad 338.
McNealy es licenciado en Económicas por la Universidad de Harvard. Al acabar su carrera hizo un MBA en al Universidad de Stanford. Esos dos años pasados en Stanford trajeron consigo una pequeña empresa bautizada como Sun, originariamente un acrónimo para la red de la Universidad (Stanford University Network).
Una de las frases preferidas de McNealy se refiere a la competencia Sin oportunidades no hay competencia. Sin competencia no hay innovación. Y sin innovación no queda prácticamente nada. Por este motivo, McNealy siempre ha apostado por los sistemas abiertos, que son las tecnologías informáticas que van más allá de compatibilizar algunos productos. Le gustan los sistemas abiertos que se basan en interfaces estándar disponibles libremente y que dan al usuario la oportunidad de elegir opciones de muchas compañías y hacen interoperativos diferentes sistemas.
Scott McNealy pertenece a lo que podríamos calificar el selecto club anti-Gates. El presidente de Sun culpa a la compañía de Gates de colocar los precios por debajo del coste del producto con el fin de sacar a la competencia del mercado. Además, reniega de vender productos empaquetados o bundles y cita como ejemplo las aplicaciones de Office y Back Office y los sistemas de Windows y NT.
En Diciembre de 1998 Sun Microsystems acusó a la empresa de Bill Gates de violar las leyes europeas de competencia mediante una política discriminatoria de distribución de licencias y por su negativa a facilitar información esencial sobre sus sistemas operativos Windows.
Sin embargo, Scott McNealy siempre se ha mostrado contrario a la posible partición del gigante del software. Considera que la división a Microsoft en dos o más compañías no traería más que problemas. Creo que investigar muy de cerca las actividades de Microsoft puede permitir a otras desarrollarse, pero sin destrozarla.
Y mientras su principal enemigo estaba inmerso en un juicio antimonopolio Sun, conocida desde hace casi 20 años por fabricar grandes equipos, descubría, casi por casualidad, un arma potentísima para meterse de lleno en el mercado del software que domina, precisamente, Microsoft. Se trata de Java, un lenguaje que ha revolucionado el mundo de la programación al permitir escribir un solo programa para cualquier sistema operativo.
McNealy está totalmente convencido de las ventajas de Java Si quieres construir una página en Internet y quieres que todos y cada uno de los internautas puedan visitarla, tiene que estar basada en Java. Es el lenguaje estándar de Internet.
La importancia que tiene Java de cara al futuro quedó reflejada a principios de este verano cuando los presidentes de Sun y Telefónica Móviles firmaron en Madrid un acuerdo de colaboración para el desarrollo de nuevos servicios móviles. Se trata de impulsar nuevas posibilidades para redes móviles utilizando tecnología Java, que facilita el uso de dispositivos móviles y logra significativas mejoras en gráficos y seguridad. El llamado m-business (comercio móvil) potenciará la incorporación de servicios de difusión de la información, aplicaciones transnacionales, juegos y ocio, aplicaciones corporativas y mensajería unificada.




