Adamo prosigue con el despliegue de fibra óptica en las zonas rurales de España. En concreto, en los últimos tres meses ha extendido su conectividad ultra rápida a 5.000 hogares de 20 poblaciones de Salamanca.
Las localidades beneficiarias de este proyecto han sido Miranda del Castañar (con más de 670 viviendas), El Maíllo (550 inmuebles), Morasverdes (450), San Martín del Castañar (425) y Sequeros, Villanueva del Conde y El Cabaco (los tres municipios rondan las 350 familias).
También Garcibuey (con 300), Galindo y Perahuy (200 hogares en El Encinar) y Tenebrón, Madroñal, Monforte de la Sierra y San Miguel del Robledo (entre 150 y 180 familias). A ellos se unen La Alberca, Herguijuela de la Sierra (en la localidad de Rebollosa), Santibáñez de la Sierra (en Santa María de los Llanos), Doñinos de Salamanca (en San Julián de Valmuza), con entre 50 y 100 domicilios conectados a la red de Adamo.
De todos los municipios a los que el operador neutro ha iluminado, destaca Castraz, uno de los pueblos con menos vecinos de la provincia de Salamanca (apenas 30) y Nava de Francia. Si bien en el núcleo principal de este último municipio son 250 inmuebles los que cuentan recientemente con fibra óptica, Adamo también cableó el anejo de El Casarito, con 20 personas censadas que ahora también tienen Internet de alta velocidad.
