La cifra ofrecida por la operadora dominante asciende a 222,97 millones de euros y sugería una compensación por la prestación del servicio proveniente de los operadoras que se benefician del mismo. Pero la CMT, además de establecer el coste por debajo de la mitad, no ha accedido a las peticiones de la operadora.
La apertura del fondo de compensación habría supuesto la aportación de unos 25 millones de euros de cada uno de los operadores que prestan servicios en nuestro país. La decisión de mantener cerrado este fondo va en contra de los intereses de Telefónica, quien considera que eso implicaría a sus competidoras en la democratización del servicio.
Pero la CMT considera que la prestación del Servicio Universal, no solo no supone un perjuicio para la operadora, si no que le aporta unos beneficios no monetarios, que la entidad ha calculado en 71,414 millones de euros.
