Las cosas se ponen cada vez más difíciles para el intercambio de archivos a través de Internet. Y es que la justicia británica ha condenado a una mujer a pagar una multa de 20.300 euros al desarrollador Topware Interactive por colgar juegos en Internet para que otros internautas se los bajasen. Esto ha motivado que la compañía haya decidido actuar contra un centenar de personas sospechosas de la misma actividad.
Hasta el momento, la actuación de los tribunales contra la piratería se había circunscrito al ámbito de la música y del cine. Sin embargo, esto supone un precedente en Gran Bretaña para perseguir cualquier intercambio de archivos protegidos con derechos de autor.
“El intercambio de archivos ilegal es una práctica muy seria, que tiene como resultado millones en pérdidas para los propietarios de los derechos”, ha explicado el socio de la firma londinense Davenport Lyons, David Gore, al diario Times Online. “A medida que la velocidad y la penetración de Internet aumentan, esto se convierte en un problema global para la industria del entretenimiento que influye cada vez más en los ingresos”.




