5G se ha convertido en la tecnología adoptada a mayor velocidad a nivel usuario hasta la fecha. Así lo ha indicado Andrés Vicente, CEO de Ericsson Iberia (en la foto), en su encuentro navideño con la prensa especializada. El directivo ha destacado el impulso vertiginoso de estas redes, un hecho que pone de relieve el último Mobility Report de la compañía.
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Tres polos de desarrollo: Estados Unidos, China e India
Sin embargo, en esta foto de modernización de redes no figura Europa. Varios polos están liderando el despliegue: Estados Unidos (que ya tenían una gran posición en 4G); China (buscando la supremacía y llevando a cabo grandes proyectos en sectores verticales); e India, un país que acaba de entrar al terreno de juego, pero que lo ha hecho levantando un vendaval a su paso gracias a un profundo plan de digitalización estatal y una fuerte consolidación de operadores.
Europa, a la zaga con cargas legislativas sobre los hombros
La otra cara de la moneda es Europa. El viejo continente continúa avanzando, pero va a la zaga, sin escala para poder progresar más rápido como consecuencia de la guerra de precios en consumo, las trabas regulatorias en la adquisición de espectro, altos impuestos o tributos -también para adquirir frecuencias-, y otros impedimentos legales que merman a las telco en beneficio de otras multinacionales exentas de estas obligaciones.
De ahí la entrada de fondos para comprar empresas ya consolidadas, que Vodafone haya vendido su filial de España en las que tenía puestas muchas esperanzas, pero cuyas expectativas no llegaban a cumplirse. O el caso de Orange-MásMóvil que no termina de cerrarse y se haya tenido que recurrir a compensaciones -los famosos remedies-, para que Bruselas vea más claro dar luz verde a la operación.
Así las cosas, en opinión de Andrés Vicente debería de haber “pactos de Estado en innovación y tecnología”, ha puntualizado, manteniendo una política a largo plazo y consistente en este sector. En otros países donde se toma la tecnología como palanca económica, se está avanzando más rápido. Y es que 5G se va a entrelazar con todo el modelo productivo estratégico de todos países. Para muestra los proyectos que estamos viendo en medios de transporte, puertos, etcétera.
“No hay unicornios en Europa porque vamos atrás en desarrollo de infra estructura digital”, ha señalado (salvo Spotify y porque le tocó en Suecia, que estaba más avanzado). Por eso, iniciativas como Open Gateway de la GSMA dibujan un campo de juego más equilibrado.
España: el mayor 5G real de Europa
Y luego está España con proyectos vigorosos como los planes ÚNICO, puestos en marcha por el Gobierno y que están inyectado los suficientes fondos públicos para que nuestro país tenga el mayor 5G real en Europa, liderando en despliegues en la banda media.
Optimismo en el horizonte
Pese a este agridulce panorama, Andrés Vicente manifiesta sentirse optimista respecto al futuro. Reconoce que, aunque no se ha resuelto el problema de raíz, “vivimos en un país que ha hecho algo” para dar la vuelta a la tortilla.
“Las telecomunicaciones deben aprovechar ese valor que generan las redes”, sentencia. Y para ello la solución es la consolidación intersectorial, intramercado y paneuropea.
