Con el objetivo de reducir gastos, según declaró el presidente de Alcatel, Serge Tchuruk, en una entrevista concedida al diario The Wall Street Journal Europe, el fabricante de equipos de telecomunicaciones francés ha decido deshacerse del 90 por ciento de las más de sus 100 plantas de producción, tras lo que comentó que pronto vamos a convertirnos en una compañía sin fábricas.
Tchuruk no precisó en ningún momento cuáles serían las factorías seleccionadas para llevar a cabo este plan, ni tampoco mencionó el número exacto de plantas que se verían afectadas por esta medida. Por su parte, los responsables de la compañía en España han declinado realizar cualquier tipo de declaración, tras afirmar que desconocían la transcendencia que esta estrategia supondría para nuestro país, en el que Alcatel cuenta con más de 4.600 empleados, de los cuales entre 1.000 y 1.300 desempeñan su labor diaria en las tres plantas de producción que la entidad posee en Toledo, Madrid y Cantabria.
Las críticas y muestras de rechazo expresadas por los sindicatos españoles UGT y CCOO, así como del principal partido de la oposición PSOE, ante los planes anunciados por la compañía no han tardado en hacerse públicas.
Los sindicatos han pedido una reunión urgente con los directivos de la firma francesa en nuestro país, en la que se aclare la situación de los empleados de las tres plantas de producción con las que cuenta la compañía en España.