IBM ha cerrado su ejercicio 2000 con un beneficio neto de 8.100 millones de dólares (7.700 millones de dólares en 1999) y 4,44 dólares por acción, sobre una facturación de 88.400 millones de dólares (15,8 billones de pesetas), cifra que se incrementa en un 1 por ciento en relación al ejercicio anterior. Mientras que el beneficio neto crecía un 16 por ciento, el beneficio por acción lo hacía en un 19 por ciento.
Para Louis Gerstner, presidente de IBM, el mercado se ha movido claramente hacia nuestros puntos fuertes la construcción de aplicaciones e infraestructura serias. Aunque también son evidentes ventajas estratégicas similares en nuestros negocios de servidores y software.
El hardware ha sido un año más el principal motor de la compañía, con ingresos de 37.800 millones de dólares, aunque estabilizado, mientras que Global Services alcanzó una cifra de 33.200 millones de dólares, con un crecimiento del 3 por ciento. El software descendió un 1 por ciento hasta 12.600 millones de dólares y Global Financing creció un 10 por ciento hasta los 3.400 millones de dólares; además de contemplar el concepto de Inversiones Empresariales, con ingresos de 1.400 millones de dólares. Por su parte, el negocio OEM descendió un 1 por ciento hasta 7.800 millones de dólares.
Asimismo, IBM terminó el año 2000 con 3.700 millones de dólares de caja, después de
gastos que incluyen la recompra de acciones, inversiones de capital de 5.600 millones de dólares y un incremento de dividendos del 8 por ciento.
Por regiones geográficas, América registró ingresos de 38.600 millones de dólares,
con un descenso del 1 por ciento; EMEA se situó en 24.300 millones de dólares, bajando en un 5 por ciento; y Asia-Pacífico subió un 16 por ciento hasta 17.700 millones de dólares.
Sobre el cuarto trimestre, IBM ha anunciado unos dividendos por acción de 1,48 dólares, con un incremento del 32 por ciento sobre los dividendos del mismo periodo del año anterior. El beneficio neto en este periodo ha quedado fijado en 2.700 millones de dólares, lo que supone un crecimiento del 28 por ciento, y los ingresos han sido de 25.600 millones de dólares, con una subida del 6 por ciento.
De acuerdo a Gerstner, el cuarto trimestre ha sido muy sólido, y lo más significativo es que este impulso reafirma claramente la estrategia que definimos hace tres años, que se fundamenta en tres premisas el mercado demanda cada vez más servicios y soluciones, no sólo productos; más servidores potentes y escalables, no sólo PCs; y, finalmente, el éxito futuro se basa en plataformas abiertas y heterogéneas.