Las nuevas normas se basan en las Recomendaciones de la serie G.983, relativas a las PON de banda ancha, que proporcionan una capacidad de red sin precedentes.
Las redes plenamente ópticas harán posible que los proveedores de servicio suministren aplicaciones tales como vídeo bajo demanda, vídeo en modo serie, juegos on line y voz basada en el IP.
Con la tecnología PON las señales son transportadas por láser y enviadas al destino que les corresponda, sin que para ello se requiera una electrónica activa. Al eliminar la necesidad de depender de costosos elementos activos de red, los operadores pueden obtener considerables economías.
La tecnología PON se utiliza en el bucle local para conectar los locales del usuario final a una red cuyos elementos sean de fibra óptica, y ofrecer a los clientes aplicaciones de vídeo, acceso muy rápido a Internet, multimedios y otras capacidades que requieran gran anchura de banda.