Los resultados que ayer presentó el Grupo Telefónica no han podido ser más positivos. A pesar de el proceso de liberación que a marcado el 2000 y de la apertura a la competencia, de la crisis generalizada de las empresas en Internet y de los polémicos procesos de adjudicación de licencias UMTS -que marcaron negativamente en el mercado bursátil-, el presidente de la compañía, Cesar Alierta, puede mostrarse satisfecho. Y es que las cifras hablan solas en términos de facturación el crecimiento es de un 24,1 por ciento, alcanzando los 4,739 billones de pesetas (28.485 millones de euros) y el beneficio neto del Grupo Telefónica se sitúa en 416.763 millones de pesetas (2.504,8 millones de euros), lo que representa un crecimiento del 38,8 por ciento.
Caben destacar los ingresos de la filial Telefónica Móviles, con un aumento del 28,3 por ciento respecto a 1999. Este crecimiento tiene mucho que ver con los ingresos procedentes de Latinoamérica, especialmente de la brasileña Telesp (57,2 por ciento) y TASA (38,3 por ciento). Por otra parte, hay que recordar la obtención de licencias de tercera generación UMTS en cinco países europeos España, Alemania, Italia, Austria y Suiza, que sitúa el mercado potencial de Telefónica Móviles en más de 190 millones de habitantes.
De la misma forma también es remarcable el crecimiento de los ingresos de Telefónica España. Tras las pérdidas sufridas en el año 1999 el negocio tradicional de telefonía fija ha vuelto a dar resultados positivos aportando el 35,8 por ciento de los ingresos totales del Grupo. Aunque el crecimiento ha sido moderado, un 2,1 por ciento, los benéficos se situaron en casi 41.000 millones de pesetas (245 millones de euros). El buen comportamiento del consumo y la buena acogida de los distintos planes de descuento, como Europa 15 o País 30, y el aumento del tráfico en Internet ayudado por la tarifa plana son algunos de los factores que han promovido que la compañía registrara unos ingresos de 10.182 millones de euros (1,69 millones de pesetas).
La nota discordante ha venido por parte de Telefónica Media y Terra Lycos. La filial de medios arrojó un saldo negativo de 499,9 millones de euros, lo que supone un 484,7 por ciento menos que el anterior ejercicio. En su comunicado el Grupo Telefónica ha querido justificar este resultado aduciendo a la inversión destinada a un saneamiento de la filial.
En cualquier caso, estos resultados sitúan al Grupo Telefónica, con más de 68 millones de clientes, a la cabeza de sus homólogas europeas.
