Los primeros resultados conjuntos entre la filial de Telefónica para Internet, Terra, y la norteamericana Lycos registran unas pérdidas brutas (antes de intereses, impuestos, amortizaciones y provisiones extraordinarias) de 96 millones de dólares, o 17 dólares por acción durante el cuarto trimestre, una cifra inferior a la prevista por los analistas, que pronosticaban pérdidas brutas de 22 centavos por acción. Atendiendo a las pérdidas del año 2000, primer año de su fusión, éstas ascienden a 348 millones de dólares (61.561 millones de pesetas).
En lo que respecta a los ingresos en los últimos tres meses del año, Terra Lycos experimentó un crecimiento de 164 millones de dólares (298.700 millones de pesetas), lo que representa un 76 por ciento más que el año anterior en este mismo periodo.
Por otra parte, Joaquim Agut, que ve con optimismo estos resultados, queda como la única cabeza principal de Terra Lycos tras la dimisión de Bob Davis, antiguo consejero delegado de Lycos, y de Ted Philip, máximo responsable de finanzas. De esta forma, Agut adquiere a partir de ahora poderes ejecutivos. Esta remodelación en la cúpula directiva de la empresa no ha sido bien acogida por los inversores, y el mercado bursátil en España castigó las acciones de Terra Lycos, las cuales se desplomaron el jueves casi en un 10 por ciento, terminando la sesión de Madrid en 16,70 euros.