La nueva herramienta se emplea para gestionar todo el ciclo de protección del software y las licencias de una compañía. Mediante su utilización, los desarrolladores obtienen la capacidad de vender y distribuir el software como deseen, sin tener que mantener múltiples sistemas DMR y sin comprometer sus productos de seguridad.
Con HASP SRM, los proveedores pueden escoger entre protección basada en hardware o en software para protegerse de la piratería del software y el uso ilegal. Así, una vez implementada la protección los fabricantes de software pueden escoger entre una llave de seguridad hardware –HASP HL- o software –HASP SL-, que será la que permita el acceso al software protegido.
Como explica Laila Arad-Allan, directora de la división de Productos de Software DMR, «para garantizar que los proveedores de software reciban beneficios por cada copia de software que se utiliza, esta herramienta emplea el algoritmo de cifrado AES de 128 bits, que crea un vínculo entre la aplicación de software y la llave de protección de HASP SRM». Durante el tiempo de ejecución, el software protegido envía cadenas cifradas a la llave de protección (HASP HL o HASP SL), que descifra las cadenas y produce una respuesta que no se puede imitar. En caso de ser correcta, la aplicación se ejecutará y de no ser así, o que la llave de protección no se encuentra presente, la aplicación no se ejecutará.
Para una migración inmediata y fluida hacia la nueva tecnología, los desarrolladores pueden adaptar estas llaves de forma remota, asegurando que las nuevas versiones de software reciben todos los avances de seguridad implementados en HASP SRM.