El operador de telecomunicaciones Jazztel, que en nuestro país es adjudicatario dentro del consorcio Banda 26 de una licencia LMDS, se ha quedado en una posición complicada tras haberse declarado en suspensión de pagos Teligent, su socio norteamericano en la operadora de telefonía local vía radio.
La firma estadounidense había intentado mantener su posición en el mercado y ganar tiempo, hasta que ha tenido que admitir que su situación económica es insostenible y se ha declararado en suspensión de pagos. En estos momentos, la compañía cuenta con unos activos valorados en 225.600 millones de pesetas (1.356 millones de euros), a lo que hay que añadir una deuda de 310.000 millones de pesetas (1.863 millones de euros) y durante el año pasado acusó unas pérdidas de 188.870 millones de pesetas (1.135 millones de euros).
Con la finalidad de superar esta situación, Jazztel tiene intención de presentar una opción de compra por el 40 por ciento del accionariado de Teligent en el consorcio, si estos aceptan un precio razonable. El ministerio de Ciencia y Tecnología podría intervenir de alguna forma en esta operación, ya que una de las condiciones de la licencia era la estabilidad del accionariado, a lo que se suma que deben dar viabilidad a la licencia.
Todo esto podría afectar de una forma muy negativa a Jazztel y retrasar el inicio de las operaciones de Banda 26, lo que no le colocaría en una buena situación en el mercado ya que algunos de sus competidores han comenzado a dar servicio a través de LMDS.
