Un incremento en sus beneficios del 11 por ciento durante el último trimestre ha llevado al gigante informático a anunciar que, por primera vez en su historia, repartirá dividendos.
Y es que el último trimestre fiscal, de octubre a diciembre de 2002, supuso para Microsoft una subida del 11 por ciento en sus beneficios, al alcanzar unas ganancias netas de 2.374 millones de euros, frente a los 2.122 millones registrados un año antes.
Este incremento en los beneficios se vio acompañado así mismo de un aumento en los ingresos de la compañía, que registró un volumen de negocio en dicho periodo de 7.951 millones de euros, un 10 por ciento más respecto a los 7.206 millones registrados del año anterior.
Estos buenos resultados podrían ser la causa de la decisión histórica de la compañía de entregar un dividendo anual a sus accionistas, algo que sucede por primera vez desde que Microsoft comenzase a cotizar en Bolsa en 1986.