Desde el pasado 1 de noviembre los clientes de Telefónica ya pueden contratar su servicio de tarifa plana a un precio de 2.750 pesetas al mes (16,52 euros), además de los bonos para llamadas locales de 700 pesetas al mes (4,2 euros) por 600 minutos, si se utilizan en el horario de 18 a 8; y 1.400 pesetas al mes (8,4 euros) por 600 minutos a cualquier hora del día.
Como consecuencia de este anuncio, Retevisión pidió a la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones que se paralizara la nueva oferta de tarifas hasta que se garantizara la posibilidad e competencia en igualdad de condiciones. Según explicaron los responsables de la operadora, con estas tarifas sus clientes no pueden beneficiarse de ofertas similares a las de Telefónica lo que les causa problemas con la fidelización de clientes y de competencia.
Por su parte, la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), tras tomar una serie de medidas cautelares, ha considerado que el Grupo Telefónica ha incurrido efectivamente en una política de precios constitutiva de un comportamiento anticompetitivo, por lo que confirma las medidas cautelares que obligaban al operador dominante a aplicar al resto de operadores unos precios de interconexión a su red para cursar el tráfico de Internet inferiores a las 2.750 pesetas, oferta de la que disfrutan los usuarios que reciben el servicio de Terra.
La CMT afirma que esta Resolución tiene como objetivo garantizar que los competidores de Telefónica en el segmento de acceso a Internet tengan la posibilidad de replicar la oferta de tarifa plana comercializada por Terra, con el consiguiente incremento de las posibilidades de elección que se ofrecen a los usuarios finales de este servicio.
Por otra parte, la Asociación de Usuarios de Internet (AUI) considera que la tarifa plana continúa sin ser rentable ya que un 87 por ciento de los españoles que se conectan a Internet desde sus hogares, lo hace por una media de menos de 5 horas semanales. Miguel Pérez Subías, presidente de la AUI, explica que esta fórmula sólo es económicamente rentable para aquellas personas que hacen un uso profesional o empresarial o para aquellos núcleos familiares con más de un usuario en el hogar y buscan simplicidad en la factura.
