La británica Vodafone ha anunciado que espera ofrecer servicios de Internet Móvil a alta velocidad a partir de julio de 2002 en el Reino Unido, siempre y cuando existan los terminales necesarios en el mercado.
Los primeros en disfrutar del servicio serán, lógicamente, las ciudades y rutas comerciales para alcanzar una cobertura del 80 por ciento de la población del país en el año 2007, según las previsiones de la compañía.
La operadora ha hecho este anuncio coincidiendo con la realización de la primera llamada UMTS en este país, mediante un prototipo de tercera generación y con la colaboración de Ericsson, principal suministrador de infraestructura 3G de Vodafone (www.vodafone.com).
Junto a la iniciativa de esta operadora, en los últimos días hemos asistido a diversos anuncios que comienzan a sentar las bases de lo que será la tercera generación de telefonía móvil.
Así, Nokia anunciaba recientemente que Orange, operador propiedad de France Telecom, le ha confiado el suministro de su red UMTS. El contrato alcanzado entre ambas compañías, con un valor de 1.500 millones de euros (249.579 millones de pesetas), convierte así a Nokia en uno de los principales proveedores de redes de acceso por radio para las redes 3G en el Reino Unido y Francia.
Nuestro país es otro de los escenarios donde la telefonía UMTS comienza a tomar forma. Muestra de ello, es el acuerdo alcanzado entre Amena y Siemens por el que la división de Información y Comunicaciones Móviles de Siemens (IC Mobile) suministrará a la operadora su red de tercera generación.
El acuerdo, que tiene una duración prorrogable de cinco años y un valor de 460 millones de euros (76.537 millones de pesetas) contempla la instalación por parte de Siemens de más de 3.000 estaciones base por toda España para la red de radio móvil de Amena.