El presidente de BT, Christopher Bland, ha sabido valorar toda la evolución de la compañía durante el pasado ejercicio fiscal terminado en una sola frase: “éste ha sido un buen año para BT”.
Este periodo de bonanza resulta esperanzador para afrontar el futuro, un período que para Bland se presenta con buena cara porque “creemos que la compañía está bien posicionada financiera, operativa y administrativamente, para superar los retos y aprovechar nuevas oportunidades”.
En cifras, los buenos resultados se traducen en unas ganancias por acción de 14,2 peniques, es decir, que se han incrementado en un 61 por ciento; además, el Grupo ha generado un cash flow neto de 1.700 millones de libras y una reducción de la deuda neta superior a los 4.000 millones de libras, lo que la sitúa en una tercera parte de lo que ésta llego a ser. El dividendo para el año completo de 6,5 peniques refleja el rendimiento financiero del Grupo, operativamente fuerte y fiable.