El fabricante de ordenadores palmOne registró una pérdida neta de 4,11 millones de dólares (3,32 millones de euros) en su segundo trimestre fiscal, cerrado en noviembre, frente al beneficio de 3,52 millones de dólares (2,84 millones de euros) que obtuvo en el mismo período del año anterior, según informa la empresa. Asimismo, los ingresos del grupo estadounidense se elevaron a 271,21 millones de dólares (219,13 millones de euros), lo que representa un incremento del 5 por ciento.
Mientras, el resultado operativo fue positivo en 2,60 millones de dólares (2,10 millones de euros), lo que supone un descenso del 51 por ciento respecto al año anterior.
A pesar del resultado neto negativo, el presidente de palmOne, Todd Bradley, se ha mostrado satisfecho con el progreso de la compañía en el segundo trimestre y ha asegurado que el nuevo negocio ha ayudado a impulsar los ingresos, a ganar cuota de mercado y a registrar un resultado operativo positivo.
En este sentido, no hay que olvidar que Palm adoptó su nuevo nombre, palmOne, tras la adquisición de Handspring y la escisión de la filial PalmSource. La nueva denominación intenta reflejar el negocio de las soluciones de hardware y software de la compañía, al tiempo que engloba las submarcas Zire y Tungsten, así como la marca Treo.