La operación, una de las mayores en el país asiático, quedará cerrada el año que viene y se produce después de que la división japonesa de Vodafone sufriera una caída en su cartera de clientes y en sus resultados, en un entorno de fuerte competencia con operadores domésticos como NTT DoCoMo y KDDI.
De los 12.700 millones de la operación, cerca de 10.000 se desembolsarán en efectivo, mientras que el resto corresponderán a acciones preferentes que, pese a tener un dividendo cero, están asociadas a un cupón del 12% en 2013. Softbank asumirá además unos 1.100 millones de deuda de Vodafone Japón.
La compra supone el desembarco de Softbank en el negocio de la telefonía móvil, después del éxito de sus servicios de banda ancha en Internet de la mano de Yahoo! BB Japón. La empresa ha adoptado una posición de liderazgo en servicios de telefonía en Internet y aprovechó el continuado descenso del precio de las acciones de Vodafone Japón en los dos últimos años.
Con el fortalecimiento de su negocio, Softbank toma posiciones para los cambios en el sector a finales de este año, cuando el Gobierno japonés permita a los consumidores cambiar de compañía al tiempo que mantienen su número de teléfono, lo que a priori generará más movimientos en las carteras de clientes.