A finales de noviembre, Telefónica reconoció oficialmente que estaba en conversaciones con BT para la venta de O2, su filial de telefonía móvil en el Reino Unido. Se estimaba que el gigante de telecomunicaciones pagaría 6.000 millones de euros al grupo español que, además, se quedaría con el 20% del operador inglés.
Asimismo, BT estaba negociando paralelamente con Everything Everywhere (EE) para adquirir sus divisiones móviles, cuyas acciones se reparten al 50% entre Deutsche Telekom y Orange.
Aunque parecía que la multinacional británica iba a decantarse por la oferta de Telefónica, lo cierto es que, contra todo pronóstico, le ha resultado más atractiva la adquisición de EE, por la que pagaría 15.700 millones (12.500 millones de libras). Se trataría de la mayor compra realizada por BT, que pagará parte en acciones y parte en efectivo, financiado con la emisión de deuda.
Orange venderá parte de los títulos que reciba y se quedará con un 4% del capital de la futura BT. Deutsche Telekom mantendría un 12% del capital, además de tener la opción de nombrar un consejero.
Los expertos creen que, si finalmente se cierra la operación, Telefónica podría buscar acuerdos alternativos en el Reino Unido con Hutchison, Sky, Virgin Media o Talk Talk.
De completarse el proceso, BT dominaría el mercado de telecomunicaciones y televisión en el país anglosajón. EE cuenta con 24,5 millones de clientes de telefonía móvil, superando en tamaño a O2.
El periodo de negociación exclusiva durará varias semanas y no implica, ha dejado claro la compañía en el comunicado, que se haya alcanzado un acuerdo que tendrían que aprobar los accionistas.