La batalla por el cliente se ha desatado. Vodafone inicia una campaña de Navidad de lo más agresiva a través de la subvención de los teléfonos móviles. Esta acción, con la que la compañía pretende acelerar la captación de clientes y compensar así la mala evolución registrada en el año, ataca directamente al pacto que desde hace más de un año mantenían en este sentido las tres operadoras móviles existentes en nuestro país.
Vodafone, Telefónica y Amena, tras recurrir a la subvención de terminales e incluso a su regalo durante sus primeros años de existencia, llegaron hace poco más de un año a un pacto tácito por el que renunciaban a continuar con esta práctica.
Así, la campaña iniciada ahora por Vodafone rompe en primer lugar dicho acuerdo y en segunda instancia, uno de los principios de la propia operadora captar cliente de alto consumo, generalmente en manos de otros operadores, conservar a los usuarios que ya tiene y maximizar su rentabilidad.
Y es que la promoción de la operadora busca atraer a usuarios cuyo nivel de consumo no justifique un gasto inicial elevado.
Concretamente, Vodafone ofrece cuatro tipos de terminales, de Alcatel, Siemens, Samsung y Motorola, a precios que oscilan entre las 3.970 y las 9.970 pesetas, en la modalidad de abono.