Con un 94% de cobertura de fibra óptica en España y un 84% en las zonas rurales, nuestro país puede presumir de disfrutar de conectividad de banda ancha en ciudades y pueblos de toda nuestra geografía. Sin embargo, somos un “país acomplejado”, ha señalado Pedro Abad, CEO de Asteo Red Neutra durante la presentación del IV Informe Observatorio Asteo. Y es que Europa y el mundo reconoce el caso de éxito de España en el despliegue de redes de alta capacidad. De hecho, dado esta velocidad y calidad de implantación “el reto ya no está en la conectividad residencial, sino en la conectividad empresarial”, ha recalcado el directivo. “El impacto social y económico de la conectividad está en ese ámbito empresarial. La conectividad no puede parar en el ciudadano, sino que tiene que llegar a las empresas”.
Pero no sólo se trata de llegar a esa fábrica, explotación agraria o ganadera que está deslocalizada, fuera del núcleo poblacional, y que son motores económicos de las zonas rurales, sino también en impulsar esta conexión como elemento de desarrollo del teletrabajo y del emprendimiento. En este sentido, el sector de las telecomunicaciones tiene mucho que decir porque ha sido el primero “que ha apoyado el emprendimiento rural”, ha subrayado Abad.
Sobre este particular, el emprendimiento es una herramienta que puede mejorar las oportunidades de quienes residen en estas áreas. Así lo entienden el 74% de los encuestados que también consideran la conectividad como una estrategia clave contra el desempleo y la despoblación en estas poblaciones.
Otro apunte del informe es que el 46% sitúan en una buena posición a España en cuestión de facilidades para que los residentes en estas zonas puedan emprender. Además, sólo uno de cada cuatro ocupados rurales (23%) tiene actualmente la opción de teletrabajar en su empleo. Entre todos los residentes que trabajan, la gran mayoría (77%) afirman que su empresa no permite el trabajo en remoto.
En cuanto a la percepción del teletrabajo como herramienta de desarrollo rural, el consenso es muy amplio, aproximadamente 4 de cada 5 encuestados (86%) cree que el trabajo en remoto es un factor relevante para fijar población en pequeños municipios. En el caso de quienes teletrabajan es el 99%.
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Mejorar la calidad de vida
Asimismo, este estudio -que Asteo lleva realizando desde 2022 para dar visibilidad a los hábitos de en qué manera estaba mejorando la cobertura en estas áreas-, pone de manifiesto indicadores sobre cómo la tecnología se está convirtiendo en una herramienta al servicio de la sociedad, un aliado para mejorar la vida de las personas. En este sentido, el uso de teleasistencia, sensores de movimiento y domótica básica ya es percibido como una ayuda para que los mayores puedan residir en sus viviendas más tiempo (70%). Y aunque el smart home está aún dando sus primeros pasos, con un 25% de los hogares conectados que disponen de algún dispositivo domótico o electrodoméstico inteligente, un 20% que afirma que tiene interés por incorporarlos en el futuro.
Además, el 94% de los encuestados están muy de acuerdo (70%) o algo de acuerdo (24%) con que la digitalización del hogar ayudaría a que los mayores puedan permanecer más tiempo en su hogar y mejorar su día a día en estas zonas.
Por otro lado, para el 72% es imprescindible contar con conexión de alta velocidad para tener una buena calidad de vida. Ese consenso abarca a todos los segmentos, aunque es más marcado entre los mayores (85%) y los residentes de los municipios más pequeños (76% en pueblos de menos de 5.000 habitantes). Es más, un 58% señala que se mudaría de vivienda si su hogar no contara con una conexión de alta velocidad. Son especialmente proclives a mudarse los menores de 35 (66%), quienes trabajan (57%) y quienes teletrabajan (76%).
Entre las actividades que realizan con mayor frecuencia los que usan internet se encuentran la búsqueda de información o navegar (90%), enviar y recibir correos (78%) y las redes sociales (71%). En último lugar estarían las consultas médicas o la formación online.
Digitalización rural, una realidad gracias a la colaboración público-privada
La presentación del informe ha tenido lugar en la sede de la Comisión Europea en Madrid y ha contado con la participación de Beatriz Alvargonzález Largo, consejera económica de la Oficina de representación de la CE que durante su intervención ha recalcado que nos encontramos en un momento definitorio de la transformación digital en el que España se ha convertido en un referente en conectividad. Un hito que ha sido posible gracias al impulso de políticas públicas nacionales, fondos europeos y apoyos privados. La directiva ha hecho alusión a los buenos datos que arroja el Informe de Cobertura de Banda Ancha que no sólo destaca el buen hacer en fibra óptica, sino también en 5G. Redes fijas y móviles de alta capacidad que ayudan a cerrar la brecha digital campo-ciudad y a hacer posible que la banda ancha no sea solamente una opción urbana. Y que abren oportunidades porque “para las zonas rurales esto significa más que conectarse online”, supone más servicios públicos accesibles digitalmente, que las pymes cuenten con las mismas oportunidades, con la posibilidad de teletrabajar, estudiar o jugar online. En otras palabras “la digitalización como palanca para el desarrollo sostenible” y que haga posible que “ningún ciudadano quede excluido por su lugar de residencia”.
Por su parte, Elena Galindo Ayuso, subdirectora general de Operadores e Infraestructuras digitales en la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, ha mencionado los diferentes programas públicos que han incentivado la expansión de redes de banda ancha en todo el territorio y que han conseguido que la diferencia campo-ciudad pase de 44 a 12 puntos a junio de 2024. Unas cifras de despliegue que nos colocan en una posición privilegiada que nos permitirá llegar a la cobertura Gigabit en la estrategia digital europea. Pero esto ha sido posible con redes terrestres y también con otras tecnologías complementarias como la conexión satelital.
Igualmente, Galindo también ha destacado el papel fundamental de los operadores locales por su contribución a mejorar las comunicaciones en las áreas rurales. “Queremos dar visibilidad a todos estos actores”, ha afirmado. De ahí los mapas detallados de servicios de banda ancha fija y móvil que el Ministerio puso en marcha para que los usuarios “puedan ver la oferta de servicios con transparencia y poder elegir su proveedor”. Unos mapas de cobertura que, como ha matizado Pedro Abad, están cada vez más llenos.
Otros aspectos destacados del informe
En el sector primario resulta indispensable una conexión de alta calidad para modernizar y gestionar eficientemente sus explotaciones. Sin embargo, únicamente el 22% de los entrevistados asegura que en el último año se ha implementado alguna tecnología digital en la empresa o explotación donde trabaja
Sobre el posicionamiento líder de España en despliegue de redes de banda ancha, solamente un 7% está al tanto, pero un 30% piensa que estamos en una situación peor que en otros países. Debido a este desconocimiento de nuestro poderío en conectividad, resulta importante seguir comunicando sobre los esfuerzos que se han hecho en este terreno.
En cuanto al uso de la IA en zonas rurales un 43% dice que sí la ha usado de manera frecuente. En 2024 era poco del 33%. El principal uso es la consulta, pero crece también su empleo como herramienta de trabajo.
Otro aspecto que también sale a relucir es que las fake news están llegando a estas zonas. un 70% de los residentes admiten haber visto o recibido noticias falsas online al menos una vez. Un 25% de manera frecuente mientras el 44% de forma esporádica
Necesidad de servicios esenciales. Igualmente, los encuestados indican que más allá de conectividad, demandan mejores servicios sanitarios y sociales, así como de transporte y vivienda.
El estudio anual del Observatorio Asteo, realizado en colaboración con Random Strategy, analiza el entorno digital y la calidad de vida en el mundo rural en municipios de menos de 10.000 y de 5.000 habitantes de toda España.
